Cómo reducir tu Lista de Tareas diarias y vivir mejor
Parece que está de moda tener la agenda a tope, llena de citas, compromisos, tareas y obligaciones. Quizá te has encontrado a más de una persona presumiendo de tener mucho trabajo y de no tener tiempo para nada. La verdad, para mi eso no es algo de lo que presumir. No hay dudada de que es muy bueno tener trabajo, pero es esencial tener tiempo para hacer y disfrutar otras muchas cosas.
Por supuesto, no resulta fácil reducir tanta actividad, ya que las responsabilidades familiares, laborales, financieras…se multiplican, somos personas atareadas.
Sin embargo, ya te he hablado del libro «Elogio de la Lentitud». En él, Carl Honoré nos propone tomarnos la vida con más calma y realizar nuestras actividades con más lentitud, para así disfrutar más de nuestro tiempo. Aunque no es tarea sencilla, todos sabemos que vale la pena intentar conseguir o al menos aproximarnos, al ideal: 8 horas de trabajo, 8 horas de ocio y 8 horas de sueño.
Al hacer las cosas más despacio y dedicar el tiempo adecuado a cada compromiso, necesariamente has de eliminar algunas cosillas de tu lista de quehaceres o agenda.
¿Que cómo puedes reducir tu lista de tareas? Pues, como digo, no es simple, ni lo puedes hacer de la noche a la mañana, pero yo te propongo que lo hagas como si de tus cuentas personales se tratara. Es decir, cuando tu nivel de gasto se descontrola, probablemente lo que hagas es estudiar con detenimiento cada partida de gasto y ver cuál es imprescindible y qué gasto no es necesario, pasando a eliminar los gastos innecesarios, como la compra de algún capricho o la suscripción a una revista que ya ni siquiera lees (por falta de tiempo).
En cuanto a las tareas, se trata de que las analices bien y las clasifiques en: tareas que debes hacer tú personalmente, tareas que puedes delegar, las que puedes pedir colaboración y las que ocupan tu tiempo sin aportar nada a tu vida. Por ejemplo, ver demasiada televisión por la noche quitándote horas de descanso y la posibilidad de madrugar y adelantar tareas importantes, lo que dejaría más tiempo libre durante el día. Quizá tu no tengas tiempo para ver la televisión (parece que no es una gran pérdida), pero puede que hagas alguna otras cosa innecesaria que esté ocupando un tiempo precioso, el tuyo.
Cuando estamos a punto de estrenar un nuevo mes de Septiembre, en el que empieza el curso escolar o laboral para la mayoría de nosotros, parece un buen momento para que pienses en organizar tu tiempo, y lo llenes de: cuidado personal, dieta equilibrada, ejercicio físico, trabajo, meditación, aficiones, familia, amigos… COSAS POSITIVAS Y MOMENTOS FELICES, para ti y por tanto para los que te rodean. No están por orden de importancia, ya que todo es importante y esencial en tu vida para ser feliz. Comienza este nuevo curso con actitud positiva y alegría, tienes un nuevo año por delante para mejorar tu calidad de vida y vivir con ilusión cada día.
¡Sonríe a la vida y la vida te sonreirá a ti!