Bobby Kennedy, ¿Qué hace que tú vida merezca la pena?

Bobby Kennedy, sólo dos meses antes de su muerte en 1968, afirmaba que seguíamos evaluando la evolución de nuestras vidas, organizaciones y comunidades basándonos en parámetros superficiales y limitados:
«Parece que nos hemos rendido a que la excelencia y los valores comunitarios se sostengan en la mera acumulación de bienes materiales. No se puede juzgar a Estados Unidos sólo por su producto interior bruto. Cuentan la contaminación atmosférica y la publicidad del tabaco y las ambulancias que limpian las sangrías de nuestras carreteras. Cuentan las cerraduras especiales para nuestras puertas y las cárceles para quienes las fuerzan. Cuentan la destrucción de nuestras secuoyas y la pérdida de entornos naturales por la fiebre expansiva. Cuentan el naplam y el gasto en armas nucleares y los coches blindados de la policía, que lucha contra la violencia callejera. Cuenta el rifle de Whitman y el cuchillo de Speck y los que fomentan la agresividad para vender juguetes a los niños.

El producto interior bruto no tiene en cuenta la salud de nuestros hijos, la calidad de su educación ni lo que disfrutan con sus juegos. No incluye la belleza de la poesía o la fortaleza de nuestros matrimonios, la calidad de los debates públicos o la integridad de nuestros representantes oficiales. No valora ni el ingenio ni en valor, tampoco la sabiduría o nuestro aprendizaje; lo mide todo en definitiva, menos lo que hace que la vida merezca la pena.”

Pregunta clave de coaching: ¿Qué crees que hace que tu vida merezca la pena?